Gremca, una empresa del sector palmero fundada hace 45 años, resurgió de una grave crisis hace tres décadas mediante un modelo asociativo innovador que integra a dueños, trabajadores y proveedores. En esta transición, los empleados se convirtieron en accionistas, logrando un equilibrio entre derechos laborales y participación en la gestión empresarial. Este modelo, basado en la confianza y el consenso, ha consolidado a Gremca como pionera en la producción de biocombustibles para aviación, con certificación mundial.
Actualmente, Gremca exporta el 50 % de su producción a mercados como Estados Unidos y Europa, pero enfrenta el desafío de la pudrición del cogollo, una enfermedad que ha reducido significativamente su eficiencia y producción. Ante esto, la empresa está renovando sus cultivos y busca apoyo gubernamental a través de créditos blandos para continuar fortaleciendo su modelo asociativo y preservar la sostenibilidad de sus operaciones.
El modelo de Gremca no solo ha generado resultados económicos positivos, sino que también ha sido una herramienta de cohesión social en las comunidades donde opera, fomentando la prosperidad compartida. Este enfoque ha llevado a Gremca a convertirse en un referente para la industria palmera, mostrando que la innovación y la colaboración pueden superar cualquier adversidad.
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